ANÁLISIS DE LA SITUACIÓN POLÍTICO-SOCIAL DE VENEZUELA A COMIENZOS DEL SIGLO XX
Período gubernamental de los generales Eleazar López Contreras e Isaías Medina Angarita
López Contreras inició su actividad política y militar en Revolución Liberal Restauradora con el ejército catristas que toma el poder a finales del siglo XIX; depuesto Castro por Gómez, López Contreras ocupa al final del lago período dictatorial de Juan Vicente Gómez, la cartera del de Ministro de Guerra y Marina. A raíz de la muerte de Gómez, López Contreras asume el control del gobierno y es proclamado por el Congreso Nacional Presidente Constitucional el 19 de abril de 1936.
López Contreras inicia un período de gobierno difícil enmarcado dentro de la gran depresión económica mundial y la tensión política interna del país; en el escenario político interno los gomecista seguían ocupando estratégicas posiciones, el capital extranjero y la burguesía nacional que no confiaban en la política de apertura pregonada por López, la llegada al país de exiliados y la reactivación del movimiento popular agitado por los partidos políticos sindicalistas y el movimiento estudiantil, aumentaron las tensiones sociales.
La época final de Gómez con el estallido y repercusiones de la gran depresión norteamericana de comienzos de la década de los años 30 y las transformaciones políticas y económicas europeas ocurridas en ese mismo tiempo. El estado del país era más que crítico, catastrófico y se deduce fácilmente de las informaciones estadísticas disponibles. La realidad socioeconómica había llegado, paulatinamente, a extremos que permiten adoptar la expresión que hemos utilizado: ¡catástrofe!
El estado no se encontraba en capacidad de dirigir y organizar la vida económica del país. Paulatinamente la actividad financiera y pública se había reducido a la sola obtención de los resultados fiscales provenientes de los impuestos del petróleo y la importación. Por el valor de la moneda era más fácil y barato comprar en el exterior que producir en el país y muy difícil, o casi imposible, tratar de vender algo venezolano fuera de Venezuela.
Los ingresos percibidos por la actividad petrolera impidieron la debacle del gobierno de López, sin embargo tuvo que lidiar con la crisis interna y actuar de manera vacilante ante la dualidad al instaurar apertura democrática y satisfacer al ala gomecista reaccionaria, a las empresas transnacionales y al poder económico local que acusaban a los partidos democráticos de oposición de comunistas; López cedió a las presiones de los grupos poderosos e inició una férrea represión a la oposición, lo cual genero en los violentos disturbios del 14 de febrero de 1936 y la huelga petrolera.
El más grave error de casi todas las fuerzas de oposición al gobierno de López Contreras fue pensar, durante el año 1936, que lo amenazarían con ataques y movimientos al parecer revolucionarios. Estimaron que el General iba a entregar el poder o que al menos lo compartiría. Pero él demostró, con los hechos, que no estaba dispuesto ni a lo uno ni a lo otro.
López necesitó enfrentar a un primer grupo de opositores, fácilmente derrotado y que pretendió mantener o establecer el orden gomecista; otros quisieron romper el sistema constitucional, lograr la elección de una Asamblea Constituyente y así crear un régimen político totalmente nuevo; para un tercer grupo, el orden constitucional nada significaba y era necesaria la Revolución.
López Contreras emprendió la erradicación progresiva del sector radical del gomecismo en las estructuras del poder y fomentó la aplicación de leyes que tímidamente abrirían paso al largo transito de la nación venezolana al sistema de gobierno democrático. Finalizado el período constitucional del General López Contreras, el Congreso Nacional el Congreso Nacional eligió al General Isaías Medina Angarita, quien ocupaba el cargo de Ministro de Guerra y Marina, como Presidente de la República.
A pesar de que sus detractores políticos lo tildaban de fascista e idolatra de Mussolini, el Presidente Medina concedió apertura y tolerancia a las libertades públicas y políticas nunca antas entonces vividas en nuestro país; se legalizaron los partidos políticos, el reconocimiento como fuerza política del partido comunista y la legalización de los sindicatos.
La confrontación bélica de la segunda guerra mundial causo estragos en la economía del país dependiente en su totalidad de los ingresos petroleros y con una agricultura en el suelo, con incapacidad de suplir los alimentos importados desde el exterior.
El gobierno tropieza con dificultades para la obtención de divisas, pues la guerra europea ha bloqueado los mercados del café y del cacao e incluso del mismo petróleo. Esto se agrava con las importaciones extraordinarias hechas por parte del comercio y la industria ante el temor de verse desabastecidos por causa de la guerra.
Por su parte, los ingresos fiscales se limitaban a los derivados del petróleo y los aduanales; impuestos sobre bebidas alcohólicas, cigarrillos, timbres fiscales, etc. No existía el impuesto sobre la renta ni ningún otro arbitrio que equilibrara la balanza de pagos.
En el escenario nacional, Medina Angarita se distanció de López Contreras, elimino toda atadura con el gomecismo, su gobierno de orientación democrática hizo énfasis en el fortalecimiento de las instituciones e introducción de reformas que repercutieron en el mejoramiento de la vida nacional, tales como la nueva Ley Petrolera que obliga a las trasnacionales a expensas de ellas el refinamiento del petróleo en suelo nacional, la ley de impuestos sobre la renta, el inicio del programa de cedulación, la incorporación de nueva población escolar a las excelentes estructuras educativas, la optimización de las redes de servicio en el interior del país, la construcción de viviendas para obreros y empleados entre otras.
Al finalizar el período constitucional de Medina Angarita, Medina entabla conversaciones con las fuerzas políticas para lograr conceso en la escogencia de su sucesor, hubo conceso en torno a la figura del Dr. Diógenes Escalante, pero debido al mal estado de salud, Medina de manera unilateral impone para sucederle al Ministro de Agricultura y Cría el Dr. Ángel Biaggini; el continuismo de los andinos y las aspiraciones de la fuerzas políticas opositoras a Medina precipitaron el golpe de Estado en su contra, perpetrado por civiles y militares el 18 de octubre de 1945. Se inauguraba en el país la intromisión en el escenario político de las fuerzas armadas, quedando atrás el alzamiento y montoneras de los viejos caudillos para acceder al poder.
Los militares imputaban a Medina un alejamiento de la institución castrense; la indiferencia por pretendidos derechos económicos que ellos consideraban impostergables y que se referían a sueldos, mejoras sociales, planes de vivienda y renovación y acondicionamiento de los sitios de trabajo,( cuarteles, campamentos etc.). Pero la mayor crítica era por la actitud del Presidente de alejar de la acción política a las Fuerzas Armadas. Desde luego, estos factores no podían ser lógicamente suficientes para gestar el golpe de Estado. Se requería el factor político. Este lo pusieron los civiles al encender la euforia del pueblo alegando la necesidad inmediata de una elección presidencial directa, así como para todos los cargos electivos y que se estableciera la incompatibilidad de funciones en los diferentes poderes de la nación.
Compartimos el criterio de Héctor Campin, en su libro titulado El Presidente Medina., todos figura clave en los procesos políticos que dominan la escena nacional en todo el siglo XX De la represión a la tiranía, en lo que respecta al golpe contra Medina que ese golpe fue más militar que político; sostiene Campins que la responsabilidad moral e histórica de Acción Democrática en este golpe, estriba en haberlo estimulado, apoyado y usufructuado, haciéndose así cómplice de la insurrección armada contra el orden legítimo. Depuesto Medina, toma el poder una Junta Revolucionaria de gobierno, integrada por implicados el golpe que depuso a Medina, tales como Rómulo Betancourt, el Mayor Carlos Delgado Chalbaud, el Capitán Mario Vargas, los doctores Raúl Leoni Gonzalo Barrios, figuras relevantes que dominarían la escena política venezolana en la segunda mitad el siglo XX.
Febrero del 2009
BIBLIOGRAFIA
CAMPINS, Héctor (1993). El Presidente Medina. De la represión a la libertad. Editorial Planeta.
FUNDACIÓN POLAR. Gobierno de Isaías Medina Angarita.
Disponible en:
http://www.org.ve/nosotros/educacional/instituc/medijgob.html#sindicatos
MOLEIRO, Rodolfo (1992).De la dictadura a la democracia. Eleazar López Contreras. Pomaire de Venezuela S.A.
POLANCO ALCÁNTARA, Tomás (1971). Eleazar López Contreras. Editorial Grijalbo.